El Juvenil B tuvo el pasado sábado la opción de proclamarse campeón de liga pero no pudo lograr los tres puntos en A Pedreira en su partido ante el Galicia de Mugardos. El equipo cosechaba un empate 1-1 que unido a la victoria del Numancia de Ares ante el A.D. Miño hace que los nuestros tengan que esperar al menos una semana para tener otra oportunidad para hacerse de forma matemática con el título.
El equipo de Manu Amado y Bochi no tenía un partido sencillo este fin de semana ante uno de los equipos de la zona medio alta de la tabla y se confirmó en el terreno de juego. Los nuestros tuvieron un gran arranque de partido y cuajaron buenos quince primeros minutos. Pese al dominio del equipo, eran los locales los que se adelantaban a punto de llegarse al minuto veinte y a partir de ahí, el partido se llenó de interrupciones que hicieron que bajara el ritmo de juego propiciando que nuestro equipo no estuviese demasiado cómodo en el resto de primera mitad y con ese 1-0 se llegaba al descanso.
En la segunda parte, el equipo dio un paso adelante y comenzó a tener llegadas ante la portería local. En una de ellas, Adri Villar ponía las tablas cuando aún no se habían disputado diez minutos y a raíz del empate, siguió buscando con insistencia el tanto de la victoria. Y tuvo varias ocasiones claras para lograrlo, incluyendo una del cadete Theo en el último minuto que entre el portero y el larguero evitaban el tanto que daría ese ansiado triunfo.
Finalmente no pudo ser y tras este empate, el equipo queda a un punto de certificar de forma matemática el título de liga y con ello la opción de poder disputar la fase de ascenso a Liga Gallega. La próxima oportunidad, este fin de semana en el encuentro que le enfrentará en Caranza al C.D. Narón, uno de los rivales más complicados de la competición.