Gran papel de los benjamines en la Hitachi Air Cup.

El pasado domingo, un equipo formado por jugadores benjamines de segundo año del club se desplazó al campo de O Monte en Mabegondo para participar en la prestigiosa Hitachi Air Cup, un torneo que reunía tanto equipos gallegos como de fuera de nuestra comunidad y que contó entre otros con la presencia del Real Madrid o del equipo portugués del S.C. Canidelo.

Nuestro equipo formado por jugadores del Benjamín B y del Benjamín C, entrenado por Fran y  Adam tuvo como rivales en la fase de grupos a la Ponferradina, el Sporting de Gijón y el Ural.

El primer partido le enfrentó al equipo leonés y el equipo tuvo un gran inicio poniéndose por delante en el primer minuto. La Ponferradina demostró ser un gran rival y conseguía darle la vuelta al resultado hasta llevarse el partido por un marcador de 4-2. A los nuestros les penalizó mucho el balón parado donde su rival se mostró como un equipo muy potente.

En el segundo partido, los nuestros se midieron al Sporting de Gijón y nuevamente realizaron un gran encuentro. Gran primera parte, nuevamente lograban ponerse por delante en el marcador y con 1-0 se llegaba al descanso después de que el equipo tuviese una clarísima oportunidad para ponerse con dos goles de ventaja. Ya en el tramo final de la segunda mitad, el equipo de Gijón dio un paso adelante y los nuestros encajaban dos goles que les dejaban sin puntuar pese a hacer un buen encuentro.

El tercer partido le enfrentaba al Ural aunque ya sin opciones de clasificación. Pese a todo, el equipo dio la cara ante un gran equipo. Los chavales se mantuvieron en el partido en todo momento y merecieron haber puntuado. Al final, un solitario tanto del equipo coruñés decidía el partido y ponía punto final a la participación de los nuestros en este prestigioso evento.

Gran papel de los niños en este torneo en el que todos los equipos participantes tenían un gran nivel. Tanto Fran como Adam se mostraban muy orgullosos del papel de los niños y por el gran esfuerzo realizado. Ambos le daban mucho mérito al hecho de ser un equipo formado por jugadores de dos plantillas distintas que con pocas sesiones de entrenamiento compitieron de forma más que notable ante grandes equipos y con opciones en los tres partidos que disputó.

En cuanto al resto del torneo, el Real Madrid se proclamó campeón después de superar en la gran final celta de Vigo por 3-0.