Las cuatro expulsiones del cadete enturbian una gran victoria.

Pincha aquí para ver el acta. Los cadetes, en una temporada irregular donde alternan buenos resultados con malas tardes, buen juego, con partidos donde nada sale, tenían una difícil salida a Villalba, ante un rival directo en la parte baja, y en un terreno de juego natural, a  lo que no están muy acostumbrados los chavales de Javi y Mahía. Y en esas circunstancias salió el mejor Galicia, el de las buenas tardes y buenos resultados. El partido, como se preveía, fue muy igualado, de alternativas, en un terreno de juego que, como también se suponía, estaba blando. El Villalbés tuvo dos buenas ocasiones, una de ellas en la que Diegui, saca el balón con la mano cuando ya entraba. Mediada la primera mitad, con el Galicia ya asentado, comienzan a dominar y a tener opciones, casi siempre con Ipi como protagonista. Y con esa igualdad, finalizó el primer tiempo.

En la segunda mitad, apretó el Galicia, y en una falta al borde del área, donde Mateo solo intentaba robar el balón, el árbitro sanciona a Mateo con falta, y lo expulsa en una decisión inexplicable. A partir de ahí, sucesión de tarjetas y recital arbitral. Son expulsados los entrenadores, Javi y Mahía, así como un jugador del Galicia que calentaba para entrar en juego, Sergio. Pese a todo, el Galicia tiró de garra, apretó los dientes, y siguió mostrándose como un equipo fuerte en defensa y correoso de medio campo para arriba. Así, con el equipo diezmado, y a falta de diez minutos para el final, Pablo, después de una buena contra, hace el primero. A falta de dos minutos para el final, Javí recibe el balón, abre a Elías, en otro buen contraataque, se va bien de su rival, la pone en el segundo palo, y Paulo la mete muy bien de cabeza. Después, Paulo hace el tercero pero el árbitro lo anula por un supuesto fuera de juego, que desde «lo que quedaba del banquillo» del Galicia se protestó por ser más que dudoso. En definitiva, gran victoria del Galicia de Caranza, que derrotó al Villalbés, y a un arbitraje que no gustó nada.